Is time to write...

Es tiempo de escribir porque las ocupaciones que me robaban el tiempo ya no son ocupaciones, pero no sólo por eso, hay que escribir por que el cuerpo ya lo pide, y porque hay de lo que hablar.

Este fin de semana he estado en Madrid, en la manifestación del día del Orgullo LGTB, detrás de la pancarta de Fundación Triángulo. El domingo y ayer lunes leí los periódicos, y me fastidia que la gente que escribe crónicas, reportajes o post en algunos blogs sea tan, tan, tan, tan poco original.


Esta semana y digo bien, SEMANA, se ha conmemorado el 40 aniversario de esa gran revolución por la consecución de la igualdad que se inició en Stonewall en el año 69.



Lo más fácil, y no me quiero extender mucho, es hacer lo que hacen todos los medios de comunicación, escribir: Había mucha gente y sacar fotos de aquellas personas que deciden poner un poco de color a la fiesta (que se agradece, porque de manifestaciones de sotanas y gente triste ya estamos hartos) y ya está, para que la gente después se pase el año diciendo "es que eso es un carnaval"


Y llegado a este punto hay que hilar fino.


Para mí todas las personas, TODAS, desde quienes iban con pantalones cortos y camiseta, con faldas, tacones, en chanclas, con la camiseta del betis o con corsé, quienes iban casi desnudas, las que iban con plumas, sombreros de colores, pantalones cortos o largos, con vaqueros y camisa (ohhh que poco original) Todas ellas me parecen valiosas y es genial que estén, por ello me parecen dignas de aparecer reflejadas en los medios de comunicación, porque esa fiesta reivindicativa es de todos y todas, de quienes participaron, incluso de quienes no pudieron disfrutarla y de quienes aun por miedo, que los y las hay, no van.


Por esto yo quiero que salgan en la tele todas las familias que allí estaban, quiero que aparezcan los camiones, la música y la algarabía, las protestas de quienes quieren que se respete la limpieza y unos mínimos, porque yo también lo pido, quiero que aparezcan las pancartas, los lemas y las reivindicaciones que allí se hacían,por que se hacen aunque los medios de comunicación no lo reflejen. Quiero que aparezcan los niños y niñas que iban con sus padres y madres, o con sus madres o con sus padres o con su madre o con su padre, dando toda la importancia del mundo a todos los plurales y singulares.


Pero para reivindicar esto a mi no me hace falta atropellar a nadie, que es lo que quiero poner de manifiesto. Es común escuchar comentarios dentro y fuera de los colectivos lgtb esas frases que vienen a decir que " a mi los gais ( las lesbianas no se nombran) me caen bien, pero la pluma....." o "las lesbianas bueno, pero las que son como hombres..... " a lo que habría que responder, tu, como la inmensa mayoría, eres un poco homofoba/o, y puede que no lo sepas.


¿por qué nos cuesta tanto valorar las diferencias, por que no somos capaces de no querer ser un poco dioses y diosas para hacer al mundo y a quienes viven en el a nuestra imagen y semejanza" fuera de la homogeneidad la verdadera riqueza reside en la diversidad, pero no en una diversidad relativa, o sesgada en apartados dónde aun haya cajones que no se puedan abrir. La riqueza reside en una diversidad en la que el valor sustituya a los prejuicios y donde quien es diferente a ti constituya un complemento y no algo que rechazar.



A mi me gusta el orgullo, me parece una muestra clara de la capacidad de las sociedades de manifestar de forma alegre y sin tapujos que nos queremos diferentes, que nos gustamos diferentes y que diferentes seguiremos reivindicando nuestro derecho a gozar de igualdad de oportunidades y derechos, sin que ello suponga renunciar a ser cada una y uno de nosotras y nosotros, especiales y únicas/os. Lo que no me gusta es el sesgo de la mirada de quienes se encargan de contárselo al resto, no me gusta que su objetivo sólo sea fortalecer los estereotipos.