Pues si que empiezan pronto...

" La grave crisis interna que atraviesa Unión Progreso y Democracia (UPyD) ha desembocado en una fractura del partido de Rosa Díez. Los críticos, a cuya cabeza está Mikel Buesa, uno de los fundadores de UPyD, harán oficial su renuncia a la militancia este miércoles a primera hora con un fax a la dirección en el que solicitan la baja voluntaria inmediata como afiliados. Se trata de una treintena de militantes que discrepan con el rumbo emprendido por UPyD en los últimos tiempos, caracterizados en su opinión por una "falta de democracia" y un "excesivo personalismo". Y acusan directamente de todo ello a Rosa Díez." (El País)

Nunca me he creído a este partido, la falsa unión y semejanza de sus integrantes y menos aun el discurso de Rosa Díez y eso supuso en su día (hace muchos días ya) una desilusión Política, porque a mi me gustaba Rosa Díez.

Mi discrepancia con las tesis de este recién creado pero revuelto partido comienzan por ese modelo de estado anclado en un nacionalismo españolista absurdo que proponen, y que llevado a fueros internos parece haberles provocado dolores de cabeza. Al igual que en el Estado Español, en las diferentes formaciones políticas hay diferentes planteamientos a cerca de la ordenación y organización estatal, y la de una grande y libre quedó pasada de moda, así como la figura de los grandes líderes, en este caso sería lideresa, que  para nada puede parecerse a los líderes totalitarios y centralistas, acaparadores de todo y en posesión de la verdad absoluta, que hasta hace cuatro días, además eran los únicos modelos que teníamos.

Pero por la boca muere el pez, y la que acusaba de falta de escucha y atenciones , de imposición de modelos etc resulta ser quien, de forma temprana provoca la estampida de miembros fundadores de esta formación que se nos planteaba como panacea y remedio de todos los males de esta España nuestra, en la que muchas personas, entre ellas quien escribe, desconfiaron desde el pro

Yo que soy extremeña y española y europea, no tengo que sacar a volar mis tres banderas para dar fe de ello  y mucho menos tengo que imponer que, mi visión del estado, sea compartida por el común de los mortales, ya que no nos olvidemos que o es ni más ni menos que un modelo, opinable, modificable, diverso y en el que todas y tdos tenemos algo que decir. Otra cosa es hablar de igualdad de oportunidades o de otros nacionalismos que me parecen igual de absurdos, y esto es lo que han confundido en el partido de Rosa Díez desde el comienzo.