los otoños suelen llegar sin avisar

dependiente como me he hecho de la wi-fi de mi vecino (vecino por un mes) y, porqué no decirlo, de esta compañera septembrina que ha decidido regalarme 31 días de sonrisas y...... s...sonrisas, no ha habido ocasión para postear aunque no han faltado temas para hacerlo.

Tengo q reconocer que este septiembre será mi septiembre; viviendo en las nubes pero al fin y al cabo, viviendo; consciente de su limitáción temporal, de su finitud. Sabiendo que el día 1 vuelve mi rutina. Creo que tengo mucha suerte..... de esa que siempre se acaba; pero que se le va a hacer, los otoños suelen llegar sin avisar y de ello em di cuenta el domingo; paseando por un parque de Salamanca cuando una hoja de esas típicas hojas que se caen de los árboles en otoño, me rozo la cara.... una semana y todo habrá pasado, todo se habrá consumido, eso, que hace unos días ,deseaba con todas las fuerzas pasó. y ¿ahora qué? ¿esperamos a que llegue la primavera?

ya veremos.

Mientras tanto el tiempo ha cundido, un inglés mejor, un español que comienza a parecer algo de español, debates sobre las identidades, Tzpi Livni, política internacional, y de medio ambiente también,bodas a las que no estamos invitadas, fotos, kilos,adios al tabaco, algo de desorden, no cumplimiento con las obligaciones familiares (lo siento chica) y mucha pero mucha paz de esa que sólo se siente por dentro.

Las cosas de opinión de política y demás las dejamos también para el día 1. Hoy sólo me apetece escribir esto y cómo no, condenaar hasta la saciedad los tristes acoontecimientos del pasado fin de semana. Los bárbaros criminales sólo se merecen mi completa repulsa......pero comienzan a hacerme sentir más cosas que no me gusta sentir: Asco y no sé si odio.....