lunes, 29 de octubre de 2007

el 82 fue un gran año...





Siempre lo he dicho, ese año dió, además de excelentes vinos, mejores avances y frutos en otras esferas como la deportiva, literaria, y como no...Política.

Hace 25 años, a estas horas, miles de personas no podían creer que fuese verdad el resultado que daban las urnas. El Partido Socialista Obrero Español había ganado las elecciones generales. Felipe González pasaría a ocupar la Presidencia del Gobierno.


Eso era impensable. Desde el balcón de la habitación 101 se estaban gritando a los cuatro vientos los sueños de millones de españoles y españolas


No podríamos llegar a imaginarnos nunca el recorrido que hicieron hasta llegar allí. La clandestinidad, la represión, continuas manifestaciones, implicación en movimientos sociales, noches de reuniones, café y tabaco, de internacional, de redacción de documentos, de logística, de estructuración, de compañeros, de ideales de sueños, de rebeldía, de perder a muchos por el camino, de recuerdos.


Yo a penas tenía 5 meses y 12 días, pero mi madre acaba de decirme que me llevaron a votar.


Por curiosidad le he preguntado a mis abuelas qué hicieron ese día. La respuesta inicial en los dos casos ha sido la misma: "No me acuerdo". A los pocos minutos han comenzado a recordar.


Una me decía que mi padre se llevó una radio de su casa para escuchar los resultados, aunque no sabía bien si fue en ese momento o cuando el 23-F. Ella votó. Ella fue partícipe del cambio, y mi abuelo y mi otra abuela....


La madre de mi madre me habla más de todo esto, pero sólo a mí (así que guardad el secreto que las vecinas no se pueden enterar).


A ella siempre la gustó la política. Mi madre decía que cuando era pequeña escuchaba "Radio París" (supongo que sería una de las emisoras que emitiendo desde el extranjero mantenía unidos a las gentes de izquierda que tenían una oreja en el transistor y otra en el "picaporte" para ver si alguien podía descubrir su secreto).


Ella también votó. Además, presenció como uno de los señores que estaban en la mesa intentó abrir el voto de otro, como cambiaron el voto a una mujer.... cosas que pasaban ¿no?




Y yo, pues casi casi naciendo, tan agusto en mi silleta, mientras naranjito ocupaba, junto a Felipe todo tipo de vallas publicitarias, paredes, teléfonos públicos, coches, camisetas.


Tuvo que ser colorido, tuvo que ser un octubre especial y una noche cargada de emoción.


Dicen que ahí se puso punto y final a la transición.
Yo estoy convencida que fue el escalón que era necesario para, más que consolidar la democracia, era el inicio real de la misma. En ese momento, sin dejar de valorar el trabajo que hicieron los antecesores, se consiguió hacer realidad una utopía.


Demuestra que merece la pena luchar por lo que se cree.


Ese día hay que brindárselo a todos/as los/as que dieron su vida, desde todos los partidos o movimientos de izquierda por defender los derechos y libertades arrasados en el 36 y enterrados durante más de cuarenta años. A todos/as los/as que se atrevieron a soñar, a luchar por conseguir tener un país mejor.

Tanto ese 28 de octubre como hoy no pueden dejar de estar presente, sobre todo los compañeros y compañeras del Partido y de Juventudes Socialistas, porque hoy somos la suma de una historia en la que ellos y ellas ocupan una parte fundamental.


Bonito día para recordar fechas, bonito día para recordar personas.

FELIZ ANIVERSARIO





4 comentarios:

Jónathan Gil Guerrero dijo...

Buenos recuerdos, dile a tú abuela que le guardaré el secreto. Saludos.

Ramon Díaz dijo...

Je, je!que bueno Silvia, no sabía tu afición a Ismael Serrano, buen final para tan grato recuerdo, te das cuenta que somos casi hijos de Felipe!!, de aquellos años solo me acuerdo de Naranjito y los dibujos animados del mundial de fútbol.

Hector Lisero dijo...

Yo tenia dos añitos y medio y se me ha vuelto a poner la piel de gallina.
Preciosa historia y tremendo final.

Anónimo dijo...

La sociedad parecía dormida... y, de repente, despertó. Besos rojos!!!