miércoles, 13 de agosto de 2008

MAHMUD DARWISH


"Mahmud Darwish no sólo es uno de los más grandes poetas árabes contemporáneos sino también una leyenda viva: sus libros circulan a millares por todos los países árabes y los estadios se llenan para escuchar sus recitales poéticos, acontecimientos irrepetibles que nadie quiere perderse. Hombre laico y moderno, refinado y elegante, Darwish es un palestino de diálogo, aunque su voluntad no se doblegue fácilmente ni esté dispuesto a hacer concesiones humillantes. Una de sus mayores esperanzas es revitalizar la literatura palestina, procurar a toda costa que los problemas políticos no la paralicen. Y para los palestinos, la proximidad física de su poeta es como una fiesta continua, un símbolo de la cultura palestina. No obstante, a pesar de haber alcanzado con creces las metas soñadas, el poeta, desde su actual residencia entre Jordania y Cisjordania, aspira a poder regresar algún día a su tierra natal, Galilea, donde nació el 13 de marzo de 19l42".

Esa aspiración se ha convertido en fustración para demasiadas personas que en muchos lugares del mundo viven en el exilio.También en este caso hay que hablar ya en pasado.


TENGO LA SABIDURÍA DEL CONDENADO A MUERTE

Tengo la sabiduría del condenado a muerte:

No tengo cosas que me posean.

He escrito mi testamento con mi sangre:

“¡Confiad en el agua, moradores de mis canciones!”.

He dormido ensangrentado y coronado con mi mañana...

He soñado que el corazón de la tierra era mayor que

Su mapa

Y más claro que sus espejos y mi cadalso.

He creído que una nube blanca me

Ascendía,

Como si yo fuera una abubilla con el viento por alas.

Y al alba, la llamada del sereno

Me despierta de mi sueño y de mi lenguaje:

Vivirás en otro cadáver.

Modifica tu último testamento.

Se ha retrasado la fecha de la segunda ejecución.

¿Hasta cuándo?, pregunto.

Esperaré a que mueras más.

No tengo cosas que me posean, respondo,

He escrito mi testamento con mi sangre:

“¡Confiad en el agua,

moradores de mis canciones!”

Y yo, aunque fuera el último,

Encontraría las palabras suficientes...

Cada poema es un cuadro.

Pintaré ahora para las golondrinas

El mapa de la primavera,

para los que pasan por la acera, el azufaifo

y para las mujeres el lapislázuli...

El camino me llevará

Y yo le llevaré a hombros

Hasta que las cosas recobren su imagen

Verdadera,

Luego oiré lo genuino:

Cada poema es una madre

Que busca a su hijo en las nubes,

Cerca del pozo de agua.

“Hijo, te daré el relevo.

Estoy encinta”.

Cada poema es un sueño.

He soñado que soñaba.

Me llevará y le llevaré

Hasta que escriba la última línea

En el mármol de la tumba:

“Me he dormido para volar”.

Y llevaré al Mesías zapatos de invierno

Para que camine como los demás

Desde lo alto de la montaña hasta el lago.

MAHMUD DARWISH.
(Publicado en el periódico Al-Hayat el 31-X-2003)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Mola, ya sabes lo que puedes regalarme de cumple, un libro de antologia de este hombre.
Un besote desde Pucela con amor

Anónimo dijo...

termina en esperanza


bs